lunes, 10 de diciembre de 2012

Quedarse plantada

Odio que la gente falte a las citas que hace. Sobre todo sí la han confirmado por tres o cuatro días seguidos, cómo me pasó hoy. Un café con unas conocidas, más por compromiso social, se convirtió en la causa de que hoy escriba de mal humor.
Y es que cuando una es madre el tiempo es oro, es platino y diamantes. Sí, yo confieso que cuando tengo una salida me vuelvo un poco neurótica, pero sí la salida es en horario de tarde mi día se corta y debo modificarlo todo. Sí a eso le unimos que hoy era día de lavado, que estoy día con nenita desde hace una semana sin ayuda de papá en camino y que me dejaron plantada, exploto.
Mientras hoy yo dejaba ropa tendida, almuerzos listos, me maquillaba, dormía a la nenita para no afectar mucho su rutina, buscaba la pañalera, hacía milagros con la comida para que papá en camino encontrará que comer al regreso...se me ilumina el cerebro y revisó los emails: que no van a llegar porque no les envíe hoy por la mañana un correo de confirmación.
¿En serio? Y el que envíe el viernes? Que digo, mientras ustedes están así, sin hacer nada, mi vida es otra. En la mañana yo baño a la bebé, corro con el desayuno, lavo ropa mientras cocino, duermo a la nena para que haga siesta, atiendo mis labores domésticas y sacó tiempo para usted, pero sí no tiene la consideración con el tiempo ajeno, mejor no me vuelva a incluir en su agenda.

2 comentarios:

  1. No me gusta nada que me planten, plantar, esperar ni que me esperen.

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  2. Sí yo te digo llego el 30 de mayo del 2015... Ten por seguro que ahí estoy!! Eso es responsabilidad!!

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