portear en un país subdesarrollado

Y así creen mis vecinos que me veo al usar la bandolera!!

Costa Rica queda en Centroamérica, donde la gente cree que aún vivimos con las normas indígenas, pero NO! Tal parece que en mi país acercarse a las raíces de los ancestros es considerado algo incorrecto, mal visto y digno de "hippies chancletudos". Portear en bandolera se ha convertido para mí en una experiencia casi "antinatural" en mi país.
Primero: no existen ventas de portabebés como el fular elástico, el rebozo, el mei tai (eso es solo para las chinas que tienen mini super...así lo dicen!), la bandolera, etc. Para conseguirlos hay que buscar esas tiendas llenas de inciensos y ropa de manta y someterse a un interrogatorio acerca de si soy new age, vegana o sí soy de otro país, triste pero cierto. Yo tuve la suerte de que la Nena me regalara un fular elástico que nunca logré usar  por lo largo, y yo tan baja... me enredaba; además, al parecer la nenita no estaba muy conforme y yo me sentía muy frustrada porque ella no se terminaba de sentir cómoda siento portada en el fular.
Solución: a través de internet conocí una chica que vendía bandoleras de anillas a domicilio, una microempresa de la que dice, pocas personas saben y con la que no saca grandes ganancias... Un día llega el preciado paquete... una bandolera de anillas color rojo, fácil de usar y que inmediatamente pongo a prueba... Nenita feliz, se acomoda como un koala y disfruta una lactada en su nuevo "hogar". Resultado: mamaencamino feliz, Nenita radiante!!
La prueba de fuego: salir de mi casa, tomar el autobús y llegar a la casa de abuelaencamino... y se desató el caos!! No más salir de la casa una de esas señoras que caminan salió a ver que traía en el cargador (un perro? una bomba nuclear?) con el consabido: eso lo usan las "indias"... señora, en América tenemos INDIGENAS, los indios viven en la India y no se les llama hindus. 
En el bus caras de... que trae esta? que se cree?... y así hasta llegar al destino. Ya en el centro de la ciudad voy por unas cintas y empiezan las voces a ser más fuertes... mirá, una hippie, mirá que estas mamás de ahora no saben ni que inventar... y el colmo fue que la señora de la pasamanería que me atendió me dijo: "eso sí es de gente hippie, como si fueran indios". 
De nada serviría explicarle a estas señoras entraditas en años que no es malo rescatar los valores de los indígenas, y que no por ser "ticos" que nos preciamos de ser cordiales y hablar con todos (más bien diría yo ser un poco desbocados cuando hablamos) podemos opinar sin que nos pregunten.
Es el colmo, en países donde la población indígena es menor, el porteo es algo normal, y acá en medio del trópico costarricense es políticamente incorrecto tratar de rescatar una tradición milenaria que además está demostrado ayuda a tener bebés sanos.
Comentarios parecidos he escuchado en el resto de los días, desde la familia extendida (si claro, esta como fue a la U viene en onda hippie-comuna de chancletudos abraza árboles) hasta la que dijo ese trapo a mi hija no se lo pongo, parece una chola...


Así que, señoras y señores... aunque no les guste, seguiré porteando a mi hija, vamos corazón a corazón, a la distancia de un beso y aunque no les guste, cada vez que una de nosotras lleva a su hijo o hija pegado a su cuerpo estamos criando con amor, no gente progre, ni "modernitos" ni nada de eso.


Y yo, muy feliz... igual que la Nenita