Acá la norma es que los bebés duerman de sol a sol: se acuestan cerca de las 8 pm y regresan a las 6, 7 los muy dormilones. Deben llevar una hora de sol, tomar desayuno, su jugo a media mañana y una merienda, siesta, almuerzo, siesta y juego.
Quien ose a cambiar eso es mala mala, mala madre. O sea, yo.
Yo entro al trabajo a las 5:30 pm y salgo antes de las diez. Salgo de casa a las 4 pm y regresó pasadas las diez, cuando acá se considera la noche. Vengo en el último bus y todas las casas tienen las luces apagadas, los niños sanos y buenos duermen y son felices. Nenita no.
Nenita tiene el horario acomodado a mí, a su madre, a su teta, a su vínculo primario. Ella no duerme sin mi beso de buenas noches, sin una toma de teta y sin sentirse segura que ya llegué. Papaencamino y la abuelaencamino la cuidan, a las diez sale el marido por mi en el carro y nenita viaja con el la mayor parte del tiempo. Nos acostamos sobre las once, después de dar mimos y teta a nenita, limpiarla, lavar sus dientes...como cualquier familia. Nenita duerme diez horas, a veces más, cómo cualquier bebé. Nenita se despierta a las nueve de la mañana y la gente cuchichea por eso.
Se despierta tarde porque duerme tarde, y no duerme antes porque todo bebé quiere a su madre y solo con ella se sirve teta. Nenita duerme feliz, despierta hambrienta, jugamos y le doy su teta. Nos levantamos tarde, desayunamos tarde, no tomamos el sol porque es medio día...pero a mi hija no le falta amor.
Y pueden ya seguir acusándome de floja, que mi casa esta impecable para nenita, que la desordena a su antojo y la ensucia mientras crece. Y puede que mi hija no vaya al parque por las mañanas y haga la siesta a la hora del almuerzo, pero tiene tiempo para juegos con su madre, sale al parque y la dejo ahí con su tita, ella juega mientras otros están en pijamas y puede que le cueste un poco más a su padre bañarla por las noches.
Pero es feliz.
Y al menos no vivió cuando su padre también trabajaba de noche.
Porque lo hacemos al revés, pero lo hacemos por ella.
Mamá en camino, aprendiendo del arte de la maternidad a través de la única fuente creíble... la experiencia
sábado, 13 de abril de 2013
De patas y al revés: vivir de noche
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Lo fundamental es que nenita crece sana y feliz. Lo demás un cuesco. Cada familia tiene su dinámica, y como tal es única y especial.
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