Me gustan los encuentros entre amigas que se dan en la mamaton. Me gusta esa sensación de hermandad, de sororidad que existe entre todas. Me encanta tener una tribu que defiende la teta y la crianza con apego.
Lo que odio es tener que convocarlas cuando son una propuesta. No me gusta que convoquemos a la tribu porque una madre ha sido discriminada y maltratada por querer dar teta, porque haya tanta gente ignorante que aún satanice la lactancia, y peor, que quieran violentar los derechos de una madre adolescente.
Así que de nuevo allá vamos, de nuevo nos amarramos el pañuelo a la frente y salimos en la lucha.
El primer colegio de señoritas de costa rica ha sido el nuevo escenario de un acto contra el derecho de las madres a dar teta, violando las leyes que protegen al niño y a su madre y dando argumentos tan pobres que son una vergüenza. Una institución con suficiente espacio cómo para que una joven pueda dar cómodamente leche a su bebé durante un tiempo, prosiguiendo la salud de su madre y la del bebé.
Ya el ministerio de educación inició un proceso, pero nosotras vamos a hacernos servir, vamos a dar la cara por todas las veces que una joven a tenido que escoger entre continuar sus estudios o dar calidad de vida a su bebé, por tantas muchachas que no han tenido el tiempo para cuidar de su bebé, por las que son señaladas y a las que se les dice que no tienen derechos por haber decidido traer al mundo una criatura antes de ser adultas.
Así que ahí vamos, porque mamá que da teta, se respeta.
Mamá en camino, aprendiendo del arte de la maternidad a través de la única fuente creíble... la experiencia
lunes, 29 de julio de 2013
De nuevo...mamaton.
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